L a nueva obra que presentaran este miércoles los internos de la Unida 5, es “El abanico” del autor Carlo Goldoni, escrita y ambientada en Venecia en el año 1765. Una vez más la puesta en escena y dirección es de la profesora Gabriela Lorusso
Es una comedia italiana en la que un objeto insignificante, un abanico de escaso valor se convierte en el motor de la acción. Este simple accesorio consigue construir relaciones, producir choques y desencadenar crisis.
En este magnífica comedia de enredos, en la que en un pueblo de las afueras de la ciudad, por culpa de un abanico roto se consuma una historia de equívocos y malentendidos, encontramos la pasión del autor por la observación de los vicios y las virtudes de una variada humanidad, fotografiada simultáneamente en todos sus estratos sociales: nobles decadentes, burgueses incapaces de tomar decisiones, gente del pueblo que ha perdido todos los temores y cultiva todavía inconscientemente pequeños fermentos revolucionarios.
Goldoni presentaba así su obra en una carta: “me ha costado un enorme esfuerzo escribirla y costará mucho más a los actores el representarla. Esfuerzo de atención, de algún ensayo de más, pero es una de esas comedias que hacen brillar el talento y la habilidad de los cómicos. La comedia depende de los cómicos y sé que estoy en lo cierto”.
Consultada a Gabriela Lorusso sobre esta nueva puesta en escena del mismo autor nos decía: “El mundo goldoniano es un juego festivo con la vida. Es por eso que para esta nueva propuesta no dudé en volver a elegir a este autor.
Porque es precisamente un juego festivo lo que experimento en cada encuentro con mis maravillosos actores. Y un aprendizaje.
Más allá de las dificultades que la vida puso en sus caminos, son capaces de saltar las piedras con la mirada puesta en el futuro, en la posibilidad del cambio y en la convicción de que la vida puede ser maravillosa.
Desde ese lugar, el teatro se les vuelve un soplo de aire fresco, una hendija desde donde asomarse a esa vida, la otra, la maravillosa, la que no se encuentra en los altos muros que a diario los rodea, pero que fabricamos con la fantasía teatral.
Y es entonces cuando transformamos lo cotidiano en una fiesta.
La fiesta de la vida.
Y porque nos divertimos, porque jugamos, porque nos acercamos a nuestro universo infantil es que elegimos para acompañar esta nueva puesta, la música de los dibujos animados que alegraban nuestra infancia.
Una fiesta que esperamos el miércoles 16 compartir con el público y que esperamos que disfruten tanto como lo hicimos nosotros en cada etapa de este nuevo desafío”.
