La importancia de la gestión y saneamiento del agua dulce

Cristián Frers* – El agua dulce es un recurso finito, vital para el ser humano y esencial para el desarrollo social y económico. Sin embargo, a pesar de su importancia evidente para la vida del hombre, recién en los últimas tiempos se empezó a tomar conciencia pública de su escasez y el riesgo cierto de una disminución de las fuentes de agua dulce.

La creciente demanda de agua es una de las problemáticas que hoy enfrenta la humanidad. En el imaginario este problema se asocia a la escasez del recurso y no a la necesidad de su gestión responsable

El acceso al agua potable es internacionalmente reconocido como uno de los derechos humanos esenciales. Sin embargo, más de 2.000 millones de personas en diversos puntos del planeta no tienen ni siquiera los servicios de agua y saneamiento más básicos. La disponibilidad del agua potable es un factor determinante para el desarrollo humano y económico en los nuevos escenarios del siglo XXI.

Entre dichos objetivos, se deberían tener en cuenta ampliar los servicios de agua potable y saneamiento, a reducir drásticamente la pérdida de vidas por enfermedades relacionadas con el agua y aliviar la escasez del recurso en los países en desarrollo.

Argentina es un Estado Federal donde los recursos naturales son propiedad de las provincias, y el agua es un recurso natural por excelencia. En tal sentido, resulta necesario recuperar los conceptos de daño estructural y renovación de la gestión de los recursos hídricos, que son estratégicos.

Hay zonas, como la Región Metropolitana de Buenos Aires, con un exceso de agua, y otras, con mucha menos: Chaco, Formosa, San Juan y Mendoza. La gestión del agua se relaciona sobre todo con la red de distribución que la lleva a diferentes poblaciones. Quizás en el norte de la provincia de Buenos Aires hay abundante agua, pero eso no quiere decir que la población cuente con un recurso de calidad para el consumo humano. Muchas veces el agua potable no es accesible para la población: en estas zonas hay lugares donde el agua no es apta para el consumo, y donde, sin embargo, se está consumiendo

¿Cuáles son los problemas de las ciudades? La urbanización es el gran problema ambiental relacionado con el agua, por su generación de aguas negras que deben ser tratadas. Es un gran problema en los países que tienen contaminados los ríos que pasan por sus ciudades y no pueden utilizar el agua para fines potables.

En los últimos tiempos hemos visto un gran aumento de descarga de aguas negras a los ríos y lagos y, sin embargo, no ha aumentado su tratamiento.

La contaminación del agua crea más desigualdad: los más afectados son los pobres de las zonas rurales de los países en desarrollo porque son los que más usan el agua de los ríos o lagos para beber, para bañarse, lavar ropa o cocinar.

La riqueza hidrológica del país es excepcional y está comprendida por las denominadas aguas superficiales, por los campos de hielo y las aguas subterráneas. Poseer esta relativa abundancia es un patrimonio natural que no solo aporta sus beneficios sino que genera el deber de utilizarlo de manera responsable. Exige de las autoridades administrarlo correctamente, emplearlo eficazmente dentro de un marco institucional y jurídico apropiado que lo preserve de su deterioro y agotamiento.

No hay duda de que tenemos las herramientas necesarias para atajar este creciente problema. Es tiempo de hacer uso de ellas para combatir lo que se está convirtiendo en una de las más grandes amenazas a la salud y el desarrollo de las personas en todo el mundo.

Para solucionar este tema, es necesario fortalecer la educación, la formación, la creación de capacidades y los esfuerzos de sensibilización en materia de gestión sostenible de los recursos de agua dulce. También requerirá la expansión de la base de conocimientos necesaria para tomar decisiones bien informadas con respecto a la gestión y uso de los procesos de recursos hídricos y el desarrollo de políticas de sostenibilidad que se ocupan de los riesgos globales de manera integrada y coordinada, incluidas las en relación con el agua.

*Cristián Frers – Técnico Superior en Gestión Ambiental y Técnico Superior en Comunicación Social (Periodista).

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