La noche del 31 y la madrugada del 1 del nuevo año dejaron un salgo en términos generales positivo. Si bien hubo más pirotecnia, expresión de la insolidaridad de quienes la arrojaron, no se lamentaron siniestros viales ni incidentes. Bomberos, Policía y Hospital arrojaron noches “normales” sin salidas de emergencia.
No hubo siniestros viales, algo sumamente importante, como así tampoco se requirió la presencia policial para acontecimientos fuera de las actuaciones cotidianas.
Los Bomberos Voluntarios no fueron requeridos, al igual que en Navidad.
La guardia del Dubarry tampoco tuvo atenciones de emergencias producto de la noche de año nuevo, sólo consultas habituales.
